19 de marzo de 2010

¿qué te queda?



lo siento de veras bonita, pero tu pelo ya sólo huele a mentiras y ansiedad..
ayer te amabas y hoy no alcanzas a soportarte. tomas café con una boca estropeada y tus ojos cerrados ya no dicen nada. no hablan de quién fuiste ni del brillo del futuro que antes irradiabas. ahora sólo quedan cicatrices y esmalte de uñas a medio quitar. sigue mordiendo para sentir, que aún así no lo conseguirás, con el estómago en el puño no se alcanzan demasiados propósitos más allá del desmayo. intenta depurarte que el tiempo que perdiste hace unos años no llegará de un momento a otro. es muy triste verte así, ni rastro del olor a vainilla de las mañanas ni las micras de sonrisas de canela. todo eso acabó, y ahora he de pedirte, sintiéndolo en el alma, que desaparezcas de mi mente para siempre, que te marches con tus gritos y tus lágrimas, que ya no quiero más de eso. que lo que yo quiero son pistachos y manzanilla de la mano de una canción en francés tarareada por quien veo enfrente mio. ya has roto todos los espejos que te recordaban tu miseria, ya has acabado con todas las panorámicas de tu felicidad. pero yo lo guardé en una caja, con una etiqueta que dice "un tiempo atrás" y te las metí debajo de la almohada. duerme tranquila, no te queda nada, pero una vez perdiste todo, no es posible perder nada más, sólo queda la mejora, o , en tu caso, el estaticismo.

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